Se puede utilizar como una suerte de brújula para elegir qué actividad realizar.
Hay semanas que tenés más energía, mientras que otras sentís que no terminás de cargar las baterías. Esto se debe, en parte, a los cambios hormonales que experimentás a lo largo del ciclo menstrual. Es por eso que el período puede ser una buena forma de elegir qué ejercicio o deporte hacer.
El ciclo menstrual de una mujer se compone de 28 días, y dependiendo de la fase en la que se esté cambia la energía del cuerpo. Las primeras dos semanas es la fase folicular, momento en el cual se produce un incremento de los estrógenos en el organismo. Las dos últimas integran la etapa ovulatoria, cuando hay mayor retención de líquido y mayor incomodidad a medida que se aproxima el período.
«De las cuatro semanas de la que consta el ciclo menstrual, la segunda es la más idónea para realizar actividad física, porque es cuando los estrógenos están en su máximo nivel y se dispone de más velocidad y potencia”, indicó a ConBienestar el deportólogo y cardiólogo de la UBA Noberto Debbag (MN: 51.320).
Por eso, podés utilizar tu ciclo menstrual como brújula para determinar qué tipo de actividades es recomendables que hagas.
Cómo elegir qué ejercicio hacer
La primera semana (del 0 a 7): es mejor una actividad no demasiado intensa debido a la mayor cantidad de sangrado. “Esto hace que se pudiera producir una disminución en los glóbulos rojos qué puede terminar en una anemia”, explicó Debbag.
La segunda semana (del 7 al 14): es aconsejable aprovechar la energía que brinda el incremento de los estrógenos para realizar ejercicios que requieran mayor fuerza e intensidad. “La segunda fase sería la óptima porque se tiene un mejor estado de ánimo por la adrenalina, la hormona de crecimiento. Entonces se puede utilizar la velocidad y la fuerza explosiva”, expuso el deportólogo.
La tercera semana (del 14 a 21): empieza la retención de líquido por la suba de la progesterona por lo que es recomendable hacer ejercicio aeróbico, como por ejemplo nadar o ir en bicicleta.
La cuarta semana (del 21 a 28): cuando se aproxima la menstruación es mejor hacer ejercicios de intensidad leve con intervalos, de ese modo se reserva parte de la energía y la sensación de cansancio se atenua.
“Se encuentre en la fase en la que sea de su ciclo menstrual, una mujer puede entrenar todos los días. Es beneficioso para el cuerpo, simplemente que es bueno dividir los ejercicios según la etapa en la que esté”, concluyó.
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