Es un método práctico, limpio y rápido. Toma entre 4 y 8 minutos. Influye el tamaño del corte y si preparamos hojas verdes o vegetales sólidos.
Aunque se use más que nada para calentar comida, las virtudes del microondas son varias. Una de ellas es que permite tener listas verduras al vapor en pocos minutos sin que pierdan el sabor, el color y la textura de estos alimentos. ¿Por qué? Los hornos microondas pueden cocinar más rápido y sin agregar agua, la cocción es más uniforme y el tiempo que pasa la comida a altas temperaturas es menor.
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), que regula la fabricación de hornos microondas desde 1971, los microondas hacen que las moléculas de agua de los alimentos vibren, produciendo el calor que los cocina. Es por eso que los ingredientes que tienen un alto contenido de agua, como las verduras frescas, se pueden cocinar más rápidamente que otros. La energía del microondas se cambia al calor a medida que es absorbida por los alimentos, y no hace que sean “radiactivos” ni “contaminados”.
Los tiempos
“Siempre a máxima potencia, los tiempos de cocción van a variar según las verduras u hortalizas elegidas, en función de su dureza y contenido en agua”, aclara a Con Bienestar nutricionista Matías Marchetti (M.M. 7.210). Para los vegetales como chauchas, brócoli, zanahorias o espárragos verdes, lo ideal es usar una cocción corta, en torno a los dos minutos por cada 200 gramos de producto, para que queden “al dente”.
La calabaza, tubérculos como la papa, la batata o la remolacha, requerirán, por lo menos, 4 minutos por el mismo peso. No obstante, lo más recomendable es ir controlando los tiempos para que no se pasen.
Importante: cada vez que se destape el recipiente para comprobar la cocción, hay que remover para que el calor se reparta parejo.
Otros consejos que comparte el especialista para hacer verduras al microondas, son los siguientes:
Aprovechar la misma agua de la verdura para su cocción al vapor. Tapar bien el recipiente y revisar constantemente para evitar que se sequen. Si es necesario, agregar un poco de agua al recipiente.
Seleccionar recipientes con tapa. De no tener tapa, utilizar papel film y cubrir el recipiente. También se pueden usar bolsas aptas para microondas.
Poner poca cantidad de verduras para que el calor se reparta equitativamente. Si las verduras son muy compactas, deben pincharse con un tenedor, previamente a su cocción.
Colocar primero las que necesiten más cocción. Si se juntan varias verduras, se recomienda ir incorporando luego las que necesitan menos tiempo de cocción.
“A la sal y el resto de los condimentos, como especias, hierbas aromáticas, aceite, limón o vinagre, hay que agregarlos una vez finalizada la cocción, porque que estos ingredientes podrían reaccionar con el calor alterando su sabor o textura”, sugiere el nutricionista.
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